El invento que muchos hombres y mujeres agradecemos todas las mañanas.

Ellas nos quieren guapos y limpios, nosotros las queremos ídem, y no siempre es fácil. Cada mañana hay que lavarse, afeitarse (o depilarse), ponerse crema, peinarse (lo que nos quede de pelo), cepillarse los dientes y, finalmente, vestirse con una camisa planchada (no todos siguen esta última premisa). Lo más difícil, sin embargo, es intentar […]