Adolf Hitler, el Rompecorazones.

A más de uno se le quedará la cara de póquer al leer el titular, pero como podréis ver en el contenido de este artículo, no estoy exagerando. Sí, ya sé, a mí también me cuesta creer que un hombre sin estudios y a todas luces no muy atractivo, ni musculoso, ni elegante, ni precisamente […]